Sam Altman vislumbra un futuro donde la identificación humana enfrenta a la superinteligencia artificial. Su proyecto World plantea desafíos éticos y de privacidad en un mundo cada vez más digital y automatizado.
World, anteriormente conocido como Worldcoin, introduce el Orb, un dispositivo que verifica la humanidad de las personas escaneando sus iris. Este ‘superapp’ busca combinar identificación, pagos y préstamos en un solo lugar, garantizando la privacidad de los usuarios al otorgarles un identificador único y anónimo.
superinteligencia artificial
Detalles principales sobre superinteligencia artificial
Altman advierte sobre la creciente dificultad de distinguir entre humanos y máquinas en internet, lo que podría facilitar estafas y suplantaciones. A pesar de las preocupaciones de expertos en privacidad y reguladores, World se esfuerza por garantizar la seguridad de los datos biométricos, incluso enfrentando prohibiciones en varios países.
Para abordar estos desafíos, World ha fortalecido su equipo de privacidad y seguridad. Aunque el sistema se presenta como ‘a prueba de bots’, las preocupaciones persisten debido a experiencias pasadas con tecnologías biométricas.
Análisis y contexto
La experiencia con Face ID de Apple ha demostrado que la aceptación de estas tecnologías puede crecer con el tiempo, a pesar de las dudas iniciales. Sin embargo, World enfrenta resistencia global, especialmente tras controversias relacionadas con la venta de datos biométricos.
La Agencia Española de Protección de Datos expresó inquietudes sobre la exposición de datos sensibles y la falta de conciencia de los ciudadanos sobre las implicaciones a largo plazo. A pesar de las mejoras en seguridad, World sigue generando debate sobre la conveniencia y los riesgos de su propuesta en un mundo saturado de IA.